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Remedios para la Diabetes

Omega 3 y Diabetes

Los ácidos grasos omega-3 son un tipo de grasas poliinsaturadas que podemos encontrar en algunas fuentes alimenticias, como pescados, mariscos, semillas y aceites vegetales. Este grupo está formado por 6 tipos de ácidos grasos, los cuales se consideran esenciales para la buena salud humana.

Entre sus muchos beneficios, hay uno que sobresale, y es la capacidad de combatir la inflamación en el cuerpo. Dado que el origen de la diabetes tiene un fuerte componente inflamatorio, las grasas omega-3 son particularmente importantes para los pacientes ya diagnosticados y para las personas pre-diabéticas.

Nota: los 6 ácidos grasos omega-3 se denominan ácido alfa-linolénico (ALA), ácido eicosapentaenoico (EPA), ácido docosapentaenoico (DPA), ácido docosahexaenoico (DHA), ácido estearidónico (SDA) y ácido eicosatetraenoico (ETA).

¿Cómo el omega 3 ayuda a combatir la diabetes?

Como se mencionaba anteriormente, una de las principales funciones de los ácidos grasos omega-3 es la reducción de los procesos inflamatorios. La inflamación es un fenómeno complejo que ocurre a nivel celular. Como resultado de diferentes estímulos, las células inflamatorias desencadenan una serie de reacciones químicas; en estas reacciones químicas intervienen las células inmunes, que son responsables de aumentar o disminuir la inflamación en el cuerpo.

Teniendo en cuenta que la inflamación es controlada mediante un equilibrio entre moléculas pro-inflamatorias y antiinflamatorias, la acción del omega-3 consiste en regular (aumentar) la producción y liberación de las moléculas antiinflamatorias.

Beneficios de los ácidos grasos omega-3 para los diabéticos

Ayuda a reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares

Los diabéticos enfrentan un mayor riesgo de padecer enfermedades cardíacas debido al impacto que puede tener la hiperglucemia en las arterias, vasos y órganos. Afortunadamente, el omega proporciona beneficios que reducen este efecto.

Un estudio realizado en pacientes diabéticos tipo 2 con triglicéridos elevados observó la disminución de estos valores en un 20-30% tras consumir 2 gramos diarios de aceite de pescado (suplemento de omega-3).1.

También se demostró que la suplementación con grasas omega 3 mejora la elasticidad de las paredes arteriales, lo que está directamente relacionado con el equilibrio de la presión arterial, así como con la prevención de la acumulación de colesterol y el bloqueo de las arterias 2.

Ayuda a reducir la resistencia a la insulina

Donde hay diabetes tipo 2, hay resistencia a la insulina; ambas condiciones van de la mano. La resistencia a la insulina provoca que los receptores de insulina en las células respondan cada vez menos ante la llegada de esta hormona. Eso se traduce en que las células no son capaces de absorber la glucosa del torrente sanguíneo, y por tanto se produce el estado de hiperglicemia característico de la diabetes.

Los ácidos grasos omega 3 pueden ser de gran ayuda en este sentido. Un estudio que involucró a 44 pacientes diabéticos observó que la sensibilidad a la insulina había mejorado significativamente en aquellos que habían recibido suplementación de omega 3 (4 gramos/día) durante 10 semanas 3. Este efecto no fue observado en las personas que no recibieron dicho suplemento.

Otros hallazgos indican que las grasas omega-3 a base de aceites de pescado son un buen remedio para el hígado graso no alcohólico, ya que mejora la actividad de la telomerasa (absorción de los nutrientes), disminuye el riesgo de neuropatía diabética, artritis, asma, intestino irritable, depresión, Alzheimer y demencia.

Ayuda a mantener la función renal

Más del 40% de las personas con diabetes tipo 2 desarrollan nefropatía diabética (enfermedad o daño renal), lo cual constituye una de las principales causas de enfermedad renal en etapa terminal.

Una investigación sobre los efectos de la administración de suplementos de ácidos grasos omega-3 (4 g/día) en 344 pacientes con nefropatía diabética mostró una mejora de la función renal, en comparación con otro grupo que solo tomó dosis más bajas 4.

De manera general, la investigación científica ha encontrado evidencias de que los omega-3 aportan los siguientes beneficios:

  1. Mejora del perfil lipídico en sangre
  2. Disminución del riesgo de enfermedades cardíacas
  3. Mejora de la función renal
  4. Reducción en la resistencia a la insulina
  5. Reducción de la inflamación

¿El omega 3 puede ser beneficioso para la Diabetes tipo 1?

Una investigación publicada en The Journal of Clinical Investigation sobre los beneficios de los ácidos grasos omega-3 para las personas con diabetes tipo 1 demostró que la adición de omega-3 a la dieta de ratones con este tipo de diabetes había mejorado significativamente el metabolismo de la glucosa y disminuido la incidencia de esta enfermedad 5.

Durante el estudio, los investigadores notaron una disminución en las proteínas pro-inflamatorias y la normalización de los niveles de azúcar e insulina en la sangre de estos roedores. Sin embargo, aún se necesita más evidencia para demostrar los beneficios reales que el omega 3 puede tener en seres humanos con diabetes tipo 1.

¿Cómo aumentar el consumo de omega-3?

Por lo general, las mejores fuentes de omega-3 son alimentos seguros para las personas con diabetes. Incluye las siguientes opciones en tu alimentación regularmente:

  • Pescados grasos, como la sardina, la caballa, el arenque y el salmón
  • Nueces y semillas (chía, linaza, calabaza)
  • Aceites vegetales (de linaza, de oliva, de canola)
  • Soja y tofu
  • Huevo
  • Aceite de hígado de bacalao
  • Aguacate

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¿Cómo tomar suplementos de omega 3 si tienes Diabetes?

Debido a lo difícil que puede ser obtener las cantidades ideales de omega 3 en la dieta occidental y de acuerdo con lo planteado en varios estudios, la dosis recomendada para tomar suplementos de ácidos grasos omega 3 oscila entre 2 y 4 gramos diarios. Ten en cuenta que esta es una dosis estándar. Siempre debe consultarse a un médico antes de comenzar cualquier plan de suplementación, ya que la dosis correcta puede diferir de una persona a otra.

Nota: los suplementos de omega 3 pueden afectar la coagulación de la sangre, de modo que su uso puede ser contraproducente si se está tomando algún medicamento anticoagulante.

Video Recomendado – ¿Cómo Saber si tu Suplemento de Omega-3 es Bueno?

 

Referencias:

  1. http://heart.bmj.com/content/85/5/544.short
  2. http://atvb.ahajournals.org/content/14/9/1425.short
  3. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/24936727
  4. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4852914/
  5. http://www.jci.org/articles/view/87388?key=bbb2df2018c8c18d1e0b

Publicado por: Luis L. Fernández. Ultima revisión: febrero 27, 2020.